Belfast, la película con la que Kenneth Branagh (1960) rememora su infancia en la capital del Úlster, es un bello anhelo de rescatar la memoria de las gentes sencillas de esa ciudad en donde se vivieron años convulsos de gran violencia.
En los primeros compases de la cinta, se nos presenta el mundo del protagonista, Buddy, de 9 años, a partir de una secuencia de cordial convivencia en una calle de clase obrera, que es interrumpida por una banda de jóvenes que ataca las casas de los católicos en un barrio de mayoría protestante. Estamos en 1969 y…