¿Quién no conoce a Hervé Tullet? Un personaje que va mucho más allá de un ilustrador de cuentos. La sencillez de sus producciones gráficas contrasta con un artista que hace participar a pequeños y grandes de sus obras: a veces los convierte en magos, otras les interpela para descubrir mezclas de colores. Pero siempre son una invitación al juego y al descubrimiento a través de la interacción con su universo singular e imaginativo.
Llevar sus libros al aula permite descubrir su versatilidad y sus posibilidades pedagógicas. Los tres puntos de colores de la cubierta de Un libro embelesan l…